Hola a todos/as:
Permitidme que me dirija a vosotros para transmitiros y compartir con todos mi alegría.
Alegría de ver cómo han disfrutado los alumnos, no en un lugar estudiado y diseñado para captar su atención, como tantos proliferan en nuestra sociedad, sino en el Auditorio de la Diputación, el auditorio de Alicante, nuestro Auditorio; donde hemos asistido a un ensayo pedagógico, en el cual la orquesta del ADDA ha hecho alarde de su buen hacer, siguiendo las indicaciones del director, Josep Vicent, quien con sus manos, como si fuese un pintor, nos ha dibujado diversas escenas, las cuales todos hemos podido contemplar con todo tipo de detalle. Al final del concierto hemos tenido la suerte de poder hacernos una foto grupal con uno de los excelentes músicos de esta orquesta, el contrabajista Iván Rubido, que fue no hace mucho alumno de nuestro colegio Nuestra Señora del Remedio.
Hoy he visto como la música ha emocionado a los alumnos, lo que demuestra que tienen una gran sensibilidad, que algunos esconden por distintas razones, y eso es motivo de alegría. Como dijo Cervantes, “…donde hay música, no puede haber nada malo.”
Quiero dar las gracias a la organización del auditorio por hacer posible la realización de estos conciertos, a la orquesta ADDA con sus excelentes músicos, a su gran director Josep Vicent y por supuesto a los alumnos, que son la razón de ser de estos. Y como solía decir el fenomenal músico y pedagogo Fernando Argenta, ¡¡VIVA LA MÚSICA!!
Mario Ruiz Barberá (Profesor de Música)