Estimadas familias,
Vivimos un tiempo donde encontramos muchas personas heridas. Un tiempo donde se nos pide ayudar, en lo material, pero también en lo afectivo y en lo espiritual. La oración es la forma que tenemos de relacionarnos con Dios a través de un diálogo sincero, abierto y confiado, donde podemos exponerles nuestras tristezas, preocupaciones, miedos…, pero donde también tenemos que expresar nuestras alegrías.
Sabéis que dentro de nuestro proyecto educativo contemplamos la formación integral de la persona donde incluimos la formación espiritual de vuestros hijos. Con esa visión de evangelización, estamos convencidos del valor educativo que tiene el evangelio y la oración para ayudar a crecer como persona y como familia.
Oremos en Familia! Aprovechemos momentos para vivir en familia la oración. Nuestra familia es el lugar donde nos sentimos acompañados: estamos seguros que no nos van a dejar abandonados en el momento del fracaso o la prueba, y es el lugar al que acudimos para recibir consuelo y reponer nuestras fuerzas para comenzar de nuevo. La oración compartida intensifica nuestra unión con Dios y la sana comunicación entre los miembros de la familia. Aún más, es un espacio oportuno para curar relaciones heridas.
Oremos con nuestros hijos! Estar en casa con los niños es una gran oportunidad para estimular y fortalecer en ellos su vida espiritual y de fe. Dediquemos unos minutos cada día a orar con ellos.
Oremos por los unos por los otros La oración de intercesión es una linda manera de mostrar empatía por las necesidades del otro y presentarlas ante Dios.
En ocasiones nos pedís orientaciones sobre cómo poder profundizar en el evangelio y en cómo ayudar también a vuestros hijos a rezar. En este artículo os dejamos un enlace enlace, os queremos proponer varias aplicaciones móviles y webs para poder facilitar esos momentos de oración y de lectura y reflexión del evangelio, momentos de encontrarnos con Jesús que nos habla cada día en su palabra.